En
el día de ayer todas las universidades nacionales (menos tres, que estaban en
proceso de formación en 2015) fueron denunciadas en una presentación que
rechazamos por irresponsable y malintencionada.
La
denuncia realizada de manera individual para
cada universidad, incluyendo a la UNS, investiga a las instituciones por
supuesta “malversación de caudales" y abarca a las autoridades
universitarias y a los empleados que tuvieron roles preponderantes en el manejo
de los fondos recibidos desde el Estado Nacional en los últimos meses del año 2015.
La
presentación judicial, que no fue comunicada oficialmente al momento de
redactar este comunicado, tiene como fundamento un recorte del diario Clarín y forma parte de una repudiable generalización sobre el conjunto de las
Universidades públicas.
Nos
preocupa que este pedido de investigación ordenado por un fiscal, forme parte
de una maniobra de desprestigio de la educación pública universitaria, dado que
se solicita después de haber pasado los requerimientos de auditorías (internas
y externas), en medio de un reclamo por la distribución sesgada de recursos
presupuestarios 2017 y en un contexto de exigencia de apertura de paritarias.
Repudiamos
cualquier ataque a la educación pública universitaria, en defensa de nuestra
institución y de sus trabajadores. Solicitamos a la comunidad universitaria de
todo el país que se exprese a través de sus órganos de gobierno, del CIN y de las
organizaciones sindicales.
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