La Memoria, la Verdad y la Justicia no se reducen a una mera apelación al pasado. Es a partir de esos pilares que debemos pensarnos como una sociedad democrática, que lucha contra la impunidad, que se moviliza por sus derechos y que ha decidido continuar con los juicios para condenar los delitos de lesa humanidad y terminar para siempre con la impunidad.
Tanto el juzgamiento de los represores como la lucha de ayer y de hoy de los organismos de derechos humanos, los sobrevivientes y familiares de víctimas son un mensaje al futuro, a las generaciones por venir. El terror no derrota al compromiso, ni siquiera apelando a dolorosas ausencias de cuarenta años. Los compañeros y compañeras que nos faltan a diario siguen, pese a ello, haciendo su valioso y cotidiano aporte: nos muestran el camino.
Es el caso de nuestro sector no docente. En esta historia colectiva viven las luchas de los compañeros detenidos-desaparecidos como Daniel Bombara, Roberto Garbiero, Coco del Río y Heriberto Prado, así como Mario Usabiaga que sufrió la cárcel y la persecución dictatorial. Con ellos decimos, PRESENTES, Ahora y Siempre.
Acto en el ex centro clandestino de detención La Escuelita - Foto de HIJOS Bahía Blanca |
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